33 (el poema tragicómico)

Reviso mi agenda
En busca de algún nombre
(cualquiera)
Mujer u hombre.
Llego rápidamente a la zeta.
No me siento muy bien…
Pero si no conté mal
Tengo treinta y tres números en mi agenda.
Treinta y tres…
Irrisorio pero al menos simbólico.
Además de ser mi edad.
A un número por año…
¡Qué promedio je, je, je!
No…
No me siento muy bien…
Pero me temo que de los treinta y tres…
No cuento con ninguno.

Coronas (el príncipe azul)

Tengo un ojo en compota
(como el de un sapo)
Y la voy de príncipe azul…
Esto es algo que las damas no me perdonan
Por más príncipe que sea entre los poetas
Por más azul que sea mi sangre espuria
Lo real es que haga lo que haga
Diga lo que diga o
Escriba lo que escriba
Voy a ser siempre mal visto por las damas.
¿Mi corazón es tan fausto como fatuo?...
¿Mi comportamiento principesco
Es realmente imperdonable o
Por el contrario
Llevo mi corona con suma modestia
Y sencillez?
¿Esto es algo que todavía está por verse
Pero que ya se vislumbraba
Cuando yo era sólo un principiante?

Sería (al lector virtual)

No,
ya no soy un purista
pero sigo escribiendo
poesía que se denigra
y se celebra a sí misma.
No,
todavía no he publicado
mi propio libro
pero ya no escribo sólo para mí.
Hoy por hoy creo que sería muy bueno tener lectores
(aunque eso parezca una obviedad)
Lectores de esos que le roban horas al sueño
Esos que se desvelan
Esos que se quedan hasta altas horas de la noche
Leyendo poemas!...
Sería muy bueno.

Hacker (ilustre desconocido)

Llueve
Y silba el viento...
Me aventuro por la avenida al río
Paseo o desfilo en soledad
como un ilustre desconocido
(sin paraguas de lujo)
Mas pecan de envidia
Los que como yo ya no se asombran con esta ciudad…
En la que el viento arrecia
como en aquel solsticio
que nos heló el corazón.
Aquel sol de medianoche...
Y esta soledad de jaker...

Quizá mi corazón es un computador…
Quizá mi sangre espuria
Y avenida al río
Ya llegó.

Absurdo

Es de madrugada.
Estoy solo e insomne.
Me sirvo un vaso de agua,
que bebo con gusto,
como cuando era feliz.
Pienso que mi soledad
(como la de cualquiera)
Es absurda
(más allá de toda explicación)
Pienso que estamos rodando un film tragicómico.
Pienso que ya no pienso
con rigor científico,
que ya no muevo mi sentimiento
para transformarlo en irrefutable pensamiento,
tan cierto como que estoy solo en esta ciudad,
o al menos así me siento…
Absurdo
(más allá de toda explicación)

Imperdonable

Perdón…
Me impacienté
Sólo quería verte
Y decirte que te extraño.
Perdón… si molesto… no es mi intención.
Me puse ansioso sí
Pero creo que es comprensible
Si tenemos presente a la soledad
La absurda soledad…
(tan absurda como las malas compañías)

Perdón…
Pero según tengo entendido
La filosofía barata está comprando billetes falsos
Para el espectáculo de la vida.
El espectáculo que nadie debería perderse,
Ya que en él se experimenta la verdadera felicidad,
Ya que en él somos capaces de amar.

Perdón...
Pero lo barato...
(como se sabe) sale caro… tan caro…
Que vos… no me vas a perdonar.

Bambalinas

La vi tras bambalinas… libar…
La vi...
La vi abrazar a otros...
La vi hacer el ridículo
Y fue espectacular…
La vi escuchando a su corazón
Ya cansino
de ser siempre ella contra todos!

La vi...
La vi en escena
Y me impresionó tanto
que yo también aplaudí.

La Poesía

a Isabel Gallo



No,
No me gano la vida.
Lo mío es perder el tiempo…
Pensando con el corazón
Y escribiendo
A la velocidad del pensamiento
La poesía del amor.

Ni más ni menos (alma de poeta)

Ya estoy quemando las últimas naves
No doy más…
Es tanta la incomprensión
(propia y ajena)
Es tanta la envidia
Me cuesta creer que me envidien a mí
Pero así es…
Aunque sea de no creer
que le envidien a uno hasta la enfermedad
Y ni hablemos de su parte genial
(si es que la tiene)
En fin… No doy más…
Es tanta la mala fe
Es tanta la bazofia que me basurea
Aunque yo sepa en el alma
(en el alma sublimada por el erotismo sí…)
que se trata de un alma de poeta
ni más ni menos

Alma de poeta-dije
Ni más… ni menos…

Alma de poeta-¡dije!
Ni más… ni menos…